segunda-feira, 14 de fevereiro de 2011

Se me quiseres conhecer

Para Antero

Se me quiseres conhecer,
estuda com olhos bem de ver
esse pedaço de pau preto
que um desconhecido irmão maconde
de mãos inspiradas
talhou e trabalhou
em terras distantes lá do Norte.

Ah, essa sou eu:
órbitas vazias no desespero de possuir vida,
boca rasgada em feridas de angústia,
mãos enormes, espalmadas,
erguendo-se em jeito de quem implora e ameaça,
corpo tatuado de feridas visíveis e invisíveis
pelos chicotes da escravatura...
Torturada e magnífica,
altiva e mística,
África da cabeça aos pés,
―ah, essa sou eu

Se quiseres compreender-me
vem debruçar-te sobre minha alma de África,
nos gemidos dos negros no cais
nos batuques frenéticos dos muchopes
na rebeldia dos machanganas
na estranha melancolia se evolando
duma canção nativa, noite dentro...

E nada mais perguntes,
se é que me queres conhecer...
Que não sou mais que um búzio de carne,
onde a revolta de África congelou
seu grito inchado de esperança.
Noémia de Sousa. Moçambique (1958)
[lido aqui]


Si me quieres conocer 

Si me quieres conocer,
estudia con ojos de ver bien
ese pedazo de madera negra
que un desconocido hermano maconde
de manos inspiradas
talló y trabajó
en tierras distantes de allá del norte.

Ah, esa soy yo:
órbitas vacías en la desesperación de poseer vida
boca rasgada en herida de angustia,
manos enormes, abiertas,
levantándose así como quien implora y amenaza,
cuerpo tatuado de heridas visibles e invisibles
por los duros látigos de la esclavitud…
Torturada y magnífica
altiva y mística,
África de la cabeza a los pies,
―ah, esa soy yo

Si quieres comprenderme
ven a asomarte sobre mi alma de África,
en los gemidos de los negros en el muelle
en los batuques frenéticos de los muchopes
en la rebeldía de los machanganas
en la extraña melodía que se eleva
de una canción nativa, noche adentro...

Y nada más me perguntes,
si es que me quieres conocer…
Que no soy más que una caracola de carne
donde la rebelión de África congeló
su grito hinchado de esperanza.

1 comentário:

Anónimo disse...

Un bonito poema de negritud, sí señor. Minervina.